Por la noche (cerca de las 3 de la mañana), uno de los participantes del campamento ecologista, Yuri Petin, fue asaltado sin motivo aparente.
Petin se encontraba al borde de la carretera de Vashutino intentando coger un coche.
Estaba cerca de una tienda, aproximadamente a 1 km del lugar dónde se lleva a cabo la tala del bosque. En ese momento, se le acercó un Hyundai negro con matrícula x531 o x513 (no lo recuerda exactamente). Cuatro hombres salieron del coche y le agarraron diciéndole: “¡Te tenemos, por fin!”. A continuación, empezaron a pegarle. Lo tiraron al suelo y le prohibieron que les mirara a la cara amenazándole con pegarle aún más.
Después, un hombre con un uniforme de Vityaz’ se acercó a los atacantes y éstos le dieron órdenes como si fuera su subordinado.
Yuri dijo: “Fue como si le dieran instrucciones al tío de la CSP [Compañía de Seguridad Privada]. Querían que dijera a la policía que yo estaba tirando petardos en el bosque. Entonces, llegó la policía. La policía empezó a hablar con los atacantes y con el guarda de seguridad. A continuación, fui llevado al segundo departamento de policía de Jimki, cuya dirección es: Jimki, calle Kudryavtseva, 4”.
Eran cerca de las 5:30 de la mañana cuando Yuri fue conducido a la comisaría de policía, en presencia de un inspector. El inspector rechazó aceptar la declaración de Yuri sobre el ataque que se produjo contra él. Por el contrario, empezó a acusarle de “hacer explotar petardos en el bosque”. Entonces, el inspector preparó él mismo un protocolo, preguntándoles a Yuri y al guarda de seguridad qué había pasado. La policía trató de fotografiarle y registrarle las huellas dactilares, amenazándole con meterlo en la cárcel si no accedía. Yuri se negó y pasó varias horas en la comisaría (hasta las 12 de la mañana). Al mediodía, Yuri se fue a su casa, acompañado de un policía, para recoger su pasaporte. A la 1 estaba otra vez de vuelta a la comisaría. A continuación, Yuri se reunió con un segundo inspector que preparó un protocolo que decía que Yuri había sido detenido por violar “las normas de seguridad antiincendios”. El inspector dijo que el protocolo debía ser transferido al Servicio de Bomberos y se negó a darle una copia del protocolo a Yuri.
“El inspector dijo que podía hacerme lo que él quisiera, colocarme drogas o armas y meterme en prisión”, contó Yuri.
Yuri Petin escribió una declaración a la oficina del fiscal, pidiendo que arrestaran y castigaran a los atacantes, así como también al policía que se negó a aceptar su declaración sobre el ataque. También pidió que buscaran al guarda de seguridad que dio el falso testimonio al policía.